Las banderas de mi barrio :
ropa tendida en las fachadas viejas olores cansados
grietas en las ventanas abiertas
corazones de puño
sudores hermanos de la misma teta.
Se abrieron las nubes y surgieron fotogramas de agua y versos de sal
Las banderas de mi barrio :
ropa tendida en las fachadas viejas olores cansados
grietas en las ventanas abiertas
corazones de puño
sudores hermanos de la misma teta.
Puerta abierta al mar
cara de alga
mirada de caracola
huella de espuma
y en el vientre
caricias azules.
Hay viajes que aunque no nos lleven a ningún lado
vale la pena recorrerlos
porque ahuyentan los miedos
porque te llenan las piernas de bicicleta.
Cuando uno llega a un sitio como este
lo primero que hace es abrir la puerta
dejar que el aire le llene de escamas
y que la montaña le dibuje
unas nuevas alas.
Cuando uno se va de un sitio como este
su sombra es más pequeña
y en sus pulmones crecen
las espigas doradas de la belleza.