Cada vez que se cierra una puerta se abre una ventana.
Dejad que vuestro corazón se llene de viento
y esparza las semillas por el suelo
así aprenderá rápido a volar.
Cada vez que se cierra una puerta se abre una ventana.
Dejad que vuestro corazón se llene de viento
y esparza las semillas por el suelo
así aprenderá rápido a volar.